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Las autoridades del Colegio de Ingenieros aseguran desconocer los profesionales a cargo de las tareas. Desde marzo de 2014, reclaman sin obtener respuesta ni de las constructoras, ni del Estado.
Motivados en “denuncias realizadas por los mismos lugareños” y luego de más de un año de presentar reclamos legales ante las autoridades pertinentes, los miembros del Colegio de Ingenieros de la provincia de Buenos Aires Distrito II, hicieron pública su “preocupación por diversas anomalías en las obras ferroviarias que se llevan adelante en territorio bonaerense”.
En diálogo con 0223, Eduardo Aquindo, presidente de la entidad, explicó que de movida “no figuran en ninguno de los carteles de obra los profesionales que están a cargo de las mismas. Desde marzo de 2014 hemos realizado las advertencias a las empresas a cargo de las tareas y también a los municipios por donde pasa la vía férrea. Nunca nos contestaron” aseguró.
“Si Doña Rosa quiere remodelar un baño o construir un garage, tiene que tener un cartel con la indicación del profesional a cargo, ¿cómo no lo va a tener una obra de este tipo?” ejemplificó al respecto el dirigente.
Las tareas para renovar y mejorar el ramal Mar del Plata-Constitución quedaron a cargo de varias empresas contratistas: Panedile - Tesur S.A. Ute, CPC Solana Ute, Luis Zonis SA y Helport Chediak Ute. “No es una empresa sola en la que se detectaron fallas. Unos hacen la alcantarilla, otra los ramales, otros tiran los cables, otros se ocupan de la fibra óptica. Es una mega obra, no nos parecemos a los ingleses al momento de invertir en una obra ferroviaria, pero al menos deberíamos intentarlo” razonó Aquindo.
Desde el Colegio aseguran haber “observado en la ejecución de la construcción de puentes de la nueva segunda vía ferroviaria de acceso a Mar del Plata, obras que obstruyen el cauce de los arroyos La Tapera y El Cardalito, utilizando diseños constructivos anticuados que podrían poner en riesgo a los moradores de las viviendas del área de influencia de dichos arroyos, sin verificar la existencia pertinente del Proyecto de Ingeniería”.
“No tenemos el poder de policía para paralizar la obra, pero estamos protegiendo a la comunidad. El ingeniero tiene la responsabilidad de una obra, si es que no sabemos ni siquiera si está debidamente habilitado, ¿a quién le vamos a reclamar después?. Cuando las obras se parten, si nadie sabe quién las hizo, las va a pagar el Estado, o sea nosotros” explicó Aquindo, notablemente molesto.
“Las alcantarillas no fueron tomadas en cuenta. Los desagotes paralelos a la ruta 2 están mal. Ya hubo inundaciones en algunos campos de Maipú. Cuando se pone un terraplén para el paso de las vías, luego es muy difícil resolver los problemas. La idea es que se ejecuten los trabajos como debe ser” concluyó el titular del Colegio de Ingenieros regional.
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113/07/2015