Hace 50 años, en octubre de 1963, la Empresa de Ferrocarriles del Estado Argentino puso en marcha su 'primer viaje experimental' entre Plaza Constitución y Bariloche.
"El ferrocarril está entrando en una etapa de renovación y mejora de servicios. Nuestra intención es reforzar las líneas y, en el caso de Bariloche, utilizar vagones remodelados que cuentan con todas las comodidades", señaló el titular administrativo de la empresa, ingeniero Rafael Balcells, cuando la formación se detuvo en nuestra ciudad.
Las expectativas eran "movilizar 2 mil pasajeros semanales", y la puesta en marcha del convoy, bautizado "Cerro Catedral", era el primer paso. Junto a Balcells viajaron los directivos de la Unión Ferroviaria y de la Fraternidad, Lorenzo Pepe, Angel Bono y Pablo López. El tren "a prueba" estaba integrado por ocho coches dormitorio remodelados en los talleres de Remedios de Escalada a un costo de 4 millones de pesos por vagón, inversión considerada "muy ventajosa", si se consideraba que uno nuevo costaba 25 millones.
El servicio Buenos Aires-Bariloche comenzó a escribirse en 1934, y uno de sus momentos destacados data de la década del 50, cuando se incorporó el "tren blanco", formado por un "coche motor" diesel Ganz, capaz de alcanzar los 120 km/h, demorando 28 horas en cumplir el recorrido. Hace unas semanas, luego de 18 años de inactividad, volvió a circular un nuevo "tren experimental", esta vez con vagones chinos, consumiendo más de 30 horas en unir ambos puntos.
La Nueva Provincia
1610-13