Siguen las críticas por la falta de vías en la extensión de la línea E

FERROCARRILES DEL SUD -- ACTUALIDAD



Persiste la polémica entre la Nación y la Ciudad sobre quién debe encarar la licitación para la colocación de vías en la extensión de la línea E del subte , que unirá Plaza de Mayo con Retiro sobre el eje de la avenida Leandro N. Alem, en el Bajo.  A los cruces entre funcionarios de ambas jurisdicciones se sumaron , ahora, voces divergentes de legisladores y candidatos. Sergio Abrevaya, presidente del Consejo Económico y Social de la CABA y candidato a diputado por Unen, dijo: "La Nación debe transferir los 1000 millones de pesos al subte y la Ciudad debe reclamarlos judicialmente. Desde 2003, Metrovías cobra un subsidio al boleto y el Poder Ejecutivo Nacional quedó con la obligación de hacer las obras que nunca se hicieron. El tendido de vías debería completarlo el gobierno nacional".  En cambio, Gabriela Cerruti, diputada porteña por Nuevo Encuentro y aliada al kirchnerismo, sostuvo que es la Ciudad la que debe asumir la nueva licitación por las vías en la línea E. "Cuando se votó la ley de traspaso del subte el gobierno porteño asumió el control de toda la red y está claro que debe comprometerse a poner en funcionamiento la nueva extensión. La Nación hizo una gran obra. Ahora, si la Ciudad se quedó corta con el presupuesto, no puede hacerlo y pide ayuda, es otra cosa", opinó.  Cerruti agregó: "Creo que se debe llegar a un acuerdo y a un entendimiento sentándose a dialogar. Es importante que este servicio esté disponible lo antes posible".  Esta obra que lleva adelante el Gobierno está demorada y la etapa de ingeniería civil sólo estaría terminada en junio de 2014, casi dos años después de lo previsto. En el contrato entre la empresa Roggio, a cargo de las obras, y la Casa Rosada, se estipula que la construcción de las tres estaciones (Correo Central, Catalinas y Retiro) no incluye la colocación de vías, señales, escaleras mecánicas ni ascensores.  Cuando comenzó esta obra, que costará unos 1200 millones de pesos, el Gobierno estaba a cargo del subte; desde enero de este año, el control del servicio pasó a manos de la Ciudad. La Nación iba a licitar esta obra; pero ahora, el Ministerio del Interior y Transporte, que encabeza Florencio Randazzo, sostiene que el subte "es de la Ciudad" y que ésta deberá hacer cargo de la licitación.  En lo estrictamente técnico, instalar 2,4 kilómetros de vías podría demandar un año y medio de trabajo, por lo que las nuevas estaciones sólo podrían habilitarse a fines de 2015, el año de las elecciones presidenciales. A juzgar por las históricas disputas entre la Nación y la Ciudad sobre quién se debe hacer cargo de esta inversión millonaria, la inauguración podría demorar mucho más.  El gobierno de Macri insiste en que la extensión de la línea E debería entregarse terminada. Juan Pablo Piccardo, presidente de Sbase, reiteró: "Hay un compromiso de que el gobierno nacional debe entregar la extensión de la línea E funcionando. Esperamos que así lo haga y que cumpla con los plazos previstos".  Para el legislador Daniel Amoroso (Confianza Pública), vicepresidente de la Comisión de Tránsito y Transporte de la Legislatura porteña, las demoras en las obras "son una clara demostración de que no hay diálogo ni trabajo conjunto entre la Nación y la Ciudad, porque los funcionarios de ambas partes no pueden dejar de lado las diferencias políticas que los separan para solucionar los problemas de los vecinos".  No obstante, agregó que está claro que "la ciudad no es una prioridad para el gobierno nacional, y por eso no sólo frena las obras de subte, sino que también paralizó el ensanche de la General Paz y el tantas veces anunciado soterramiento del ferrocarril Sarmiento". 
La Nación
20/08/13