La espectacular estación de trenes que jamás llegó a ser construida

INFORME ESPECIAL

Hace 30 años se conocía el proyecto para construir un moderno complejo, que tenía plaza, terrazas y hasta puentes. La crisis financiera lo frenó y la desaparición del tren luego lo hizo inválido.
CONFITERÍA. Una serie de terrazas remataban en la confitería, que iba a ser el punto de unión entre pasajeros y público en general, de acuerdo al proyecto.


Era monumental pero especialmente vanguardista. El San Juan de 1984 se emocionaba hace 30 años cuando se hizo público el proyecto arquitectónico para hacer la nueva estación de trenes San Martín. Iba a tener grandes espacios verdes, terrazas, confiterías e incluso puentes que atravesaban avenida Córdoba e Ignacio de la Roza. Sin embargo, por falta de fondos fueron pasando los meses y los años sin que pudiera empezar a construirse. Luego entró en escena la crisis del ferrocarril que hizo desaparecer los trenes de pasajeros y entonces aquella iniciativa quedó sepultada para siempre.

El proyecto, realizado por tres arquitectos, fue el ganador de un concurso regional que para tal fin organizó el por entonces Ministerio de Obras y Servicios Públicos de la provincia. Esos arquitectos firmaron luego un contrato con el Estado y concluyeron todo el proceso para poder ejecutarlo, con los cálculos, las instalaciones y las estimaciones de costos, además de la aprobación de planos de Planeamiento. En ese staff trabajaron también ingenieros y otros colaboradores técnicos. Es decir, sólo quedaba llamar a licitación para construirlo, recordó Héctor Muñoz Daract, quien junto a Anaí Martínez y Rodolfo Matus (ya fallecido) ganaron el concurso.

‘Los problemas empezaron por la falta de fondos. La Argentina por entonces atravesaba momentos muy duros y el proyecto se empezó a estirar. Nunca había plata para empezar aunque sea con una etapa y comenzaron a pasar los meses y los años. Después pasó lo que todos sabemos con los trenes de pasajeros y aquella iniciativa que pudo ser muy importante para San Juan se convirtió en frustración. Es más, nunca nos terminaron de pagar el trabajo’, acotó Muñoz Daract.

La nueva estación de trenes comprendía la terminal propiamente dicha y espacios verdes que conformaban todo un conjunto, por lo que incluía las manzanas desde Ignacio de la Roza hasta 9 de Julio, entre Las Heras y España, uniendo a su vez el Centro Cívico y el Parque de Mayo. Con ello, se materializaba la vieja aspiración del plan ferrourbanístico. El nuevo complejo y los andenes iban a tener acceso desde Las Heras. El edificio se complementaba con dos torres, destinadas a oficinas y venta de boletos, mientras que lo más impactante era su plaza. Esta iba a tener bancos, juegos, un espejo de agua y zonas para exposiciones y actividades recreativas. Se caracterizaba por sus distintos niveles, con terrazas incluidas, y porque pretendía vincularse con la manzana contigua a través de un puente sobre avenida Córdoba.

Precisamente, el predio donde actualmente está el Centro Cultural San Martín iba a ser un sector totalmente parquizado y la vieja estación se convertiría en un Museo del Vino. Todo este lugar, por su parte, tenía proyectado unirse con el Centro Cívico, que por entonces llevaba tres años de paralización, a través de otro puente sobre Ignacio de la Roza. A 30 años, el proyecto quedó perdido en los cajones del olvido.

Diario de Cuyo 
11/04/2014