Todavía no se define la ruta y la estación a la que llegará el servicio a la ciudad, ni cómo reubicarán asentamientos.
El martes, el primer día hábil de la semana próxima, comenzarán finalmente los anunciados trabajos en el ramal Rosario-Buenos Aires, que ya cuenta con algunos coches adquiridos en China y arribados al país. Lo confirmaron ayer fuentes de la Secretaría de Transporte de la Nación, que encabeza Alejandro Ramos. Pero lo que aún no se pudo certificar es la ruta y la estación a la cual ingresará el servicio de pasajeros a la ciudad: podría llegar a Rosario Norte (avenida Aristóbulo del Valle 2750), a Central Córdoba (27 de Febrero y Laprida) o al Apeadero Sur (Teniente Juan Carlos Sánchez 6278) , entre otras alternativas en danza, cómo había adelantado el gobernador Antonio Bonfatti.
Esta obra no implica solamente una cuestión técnico ferroviaria sino la reubicación de asentamientos irregulares establecidos sobre las vías, las inversiones complementarias, además de los fondos para realizar los trabajos. Nada menos.
Para Ramos, según sus propias palabras, las "ganancias y esfuerzos deben ser compartidos". De ese modo, dejó en claro que entendía que la ganancia del proyecto es mayoritariamente para Santa Fe. "A beneficios compartidos, esfuerzos compartidos", resaltó en su momento.
Bonfatti, en tanto, al hablar del proyecto y su inversión, se inclinó por un posible arribo a la estación Central Córdoba, al considerar que era la opción "menos onerosa". Para él, significa un menor recorrido del tren por la ciudad y mover en menor medida a las familias que están asentadas sobre las vías. Y, ante la posibilidad de compartir esfuerzos, agregó: "Santa Fe tiene capacidad de tomar crédito, no tenemos problemas en afrontar erogaciones".
El municipio también se había sentado opinión. "Hay que buscar estrategias para minimizar esas inversiones que están por fuera de la recuperación de vías: corresponde a la Nación", afirmó, a su turno, el secretario de Planeamiento, Pablo Barese.
En acción. Los trabajos implican 18 meses de obra en los once tramos ya licitados y adjudicados Son 518 kilómetros y demandarán una inversión de 2.500 millones de pesos.
Con las obras en marcha, y con parte de los coches ya adquiridos en China y arribados al país, queda definir la estación a la que llegará el tren a Rosario.
Los vagones fueron construidos por la China North Locomotive and Rolling Stock Industry Corporation (CNR). La primera remesa (17 vehículos) llegó al país en mayo pasado. Cada formación tendrá capacidad para 500 pasajeros.
Para Ramos, la llegada del tren debía definirse en función del desarrollo de la región y de la recuperación de otros ramales planificados por la Nación.
De ese modo, indicó que deben tenerse en cuenta factores determinantes como son las características del área metropolitana, la accesibilidad y que en el futuro el servicio sirva para conectar a otros destinos.
Bonfatti, a su vez, dijo que se habían estudiado en la provincia distintas alternativas.
"La que nos parece más viable como provincia es la estación Central Córdoba. En nuestra valoración, es la solución menos onerosa y sería lo óptimo, pero no damos el tema por cerrado", había resaltado el mandatario santafesino.
De todos modos, existen otras opciones para posibilitar la llegada del tren a Rosario. Una es expropiar terrenos en zona rural, otra lograr que ingrese por el puerto o diseñar un codo y una curva que circunvale el acceso, lo que indudablemente alargaría los tiempos de viaje.
"Hay que sentarnos para acordar y decidir cuál de todas ellas es la mejor", instó Bonfatti.
Actualmente, los servicios que llegan a Rosario provenientes de Buenos Aires pasan por Muñoz y San Martín. Y, desde el sur, van hacia el oeste, hasta Cabin 9, para recién ingresar a la estación Rosario Norte, recorriendo distintos accesos a la ciudad y perdiendo mucho tiempo para el desembarco.
El objetivo de la licitación del corredor ferroviario es cubrir las necesidades de transporte en ambos centros urbanos. La reactivación del servicio permitirá disminuir la circulación vehicular por la autopista a Buenos Aires, con una reducción de los accidentes viales de entre 5 y 7 por ciento.
La Capital
09-10-13