Puja política por el tren Retiro-Rosario

FERROCARRILES DEL SUD -- ACTUALIDAD

Se necesita una fuerte inversión y el Gobierno quiere compartirla con la provincia
Se puede explicar todo en pocas palabras: el tren Retiro-Rosario tiene un gran y único problema: no puede hoy ingresar en Rosario. La realidad indica que el servicio sólo puede operar hasta la localidad de Alvear, 14 kilómetros al sur de la tercera ciudad más importante del país.
Si se pretende que arribe a la estación Rosario Norte (la tradicional y definida por el municipio) o a Central Córdoba (la que pretende la Nación), se debe disponer de 20.000 millones de pesos. ¿La razón? Ese monto debería utilizarse para erradicar las villas que intrusan las vías en los accesos sur y oeste.
El problema no es nuevo. Hay que aceptar que era previsible. En la década de los 90 el tren dejó de pasar, y los terrenos quedaron sin demarcación ni carteles anunciando a quiénes pertenecían. Por eso también proliferaron las villas de emergencia, urbanizaciones muy precarias que se formaron pegadas a las vías, inclusive, en muchos lugares, sobre esos tendidos.
Actualmente, el servicio, que une Tucumán con Retiro, pasando por Rosario, se encamina a Buenos Aires por un dispositivo que evoluciona por el noroeste de la ciudad. El trayecto hasta Retiro (339 kilómetros) demanda algo más de 7 horas.
En su momento, cuando el gobierno nacional puso sobre la mesa unos $ 2500 millones para renovar 530 kilómetros de vías, en 11 tramos, no tuvo en cuenta esta situación: el tren concluye su recorrido en el apeadero de Alvear. Y no tiene forma de continuar, con el consiguiente inconveniente para los usuarios. Sobre el tema, se recordó que el tramo del recorrido ferroviario que falta licitar, una vez que se defina el llamado proyecto ejecutivo, es el que une Alvear con Rosario, ya sea ingresando por el oeste o por el sur. La variante Oeste es riesgosa y se puede comprobar casi a diario, con robos a los vagones con cargas.
Para que el tren llegue a Rosario, hay que destinar $20.000 millones para erradicar las villas que intrusan las vías en los accesos sur y oeste
Semanas atrás, el secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos, ex intendente de Granadero Baigorria, muy próxima a Rosario, dijo en una conferencia que "el Gobierno tiene presupuestado los fondos para la renovación del tendido, pero es la Municipalidad (de Rosario), y sobre todo el gobierno provincial, el que debe hacerse cargo de despejar el trayecto y concretar las urbanizaciones, el trabajo social y las expropiaciones de terrenos que se demande".
"En intervenciones urbanísticas y expropiaciones se deberán invertir al menos 20.000 millones de pesos", calcula Juan Venesia, ex presidente del Ente Administrador de Puerto Rosario.
Si bien el secretario Ramos guardó las formas al decir "que la Nación obviamente colaborará y la idea es que el tema se debata en la misma mesa dónde se defina la localización de la estación", no dudó en señalar: "a mi entender debería estar pensado para impulsar [el ingreso por] la zona sur".
Y fue claro en el mensaje que envió al gobierno que encabeza el socialista Antonio Bonfatti: "La administración provincial es quien debe hacer esas gestiones de desarrollo urbano. Seguro vamos a colaborar, pero Santa Fe y Rosario deben aportar financiamiento y hacer frente a su obligación de urbanización de las zonas carecientes en los accesos".

El tren a Rosario no llega a destino

Sobre las vías que entran en la ciudad hay villas
Alejandro Ramos
Secretario de Transporte 
"Es el gobierno provincial el que debe hacerse cargo de despejar el trayecto [del tren]" 

La Nación
23-09-13